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martes, 16 de agosto de 2022

Lección 129, Noveno Grado, Tercera Orden

 "La única Fórmula Magistral para triunfar en la Magia"


-El verdadero ABRAKADABRA de la Magia-


"Deseo (introspección), Voluntad (concentración), Actitud (Visualización), Acción (Meditación), Constancia y Paciencia (éxtasis)"


Todos los seres humanos vienen, de serie, preparados para hacer Magia; en tanto que son seres con capacidades mágicas, son mágicos. El problema es que, por regla general, al común de los mortales, por indolencia, por pereza, le cuesta abandonar su zona de confort, planificar, ponerse en movimiento y persistir en su Objetivo. 


Quienes están acostumbrados a que sean otros los que actúen por ellos se encuentran muy lejos de mostrar una actitud mágica; pero aún así, la Magia se encuentra letente en ellos. Desde que el Ser Humano nace, mientras vive, y hasta que muere, está realizando Magia. El solo Vivir y reproducirse son actos puramente mágicos.


Cada vez que pensamos, elucubramos, decimos y actuamos estamos realizando Magia; pero solo aquellos que siguen el Plan Maestro de la Fórmula Mágica son capaces de conseguir resultados positivos. Cuando esto sucede se dice, de forma errónea, que el individuo ha triunfado en la vida, es un triunfador que desborda carisma por todas partes y es capaz de liderar cualquier cosa que se le proponga.


La Fórmula es seguir secuencialmente un Plan estratégico muy simple y definido y que sólo funcionará si se sigue al pie de la letra y sin saltarse ni uno solo de los pasos.


Todo comienza con la Imagen de el Deseo de algo que sea realmente necesario y que queremos que se manifieste en el (Acto Mágico). Sin la existencia de éste primer paso, son inútiles los siguientes, dado que para que un paso se vuelva eficiente es necesario que el anterior se haya completado. Ese Deseo mágico pertenece al Mundo de las Ideas y solo puede activarse desde la (Introspección); esto quiere decir que se debe de profundizar dentro de uno mismo con el fin de dilucidar si ese Deseo es legítimo. Si no lo fuera, las consecuencias de traer a la Luz un Deseo ilegítimo puede resultar en nefastas consecuencias.


Una vez determinado que nuestro Deseo es legítimo deberemos de cargarnos de Voluntad con el fin de que el Acto Mágico pueda llevarse a efecto. Esto siempre está acompañado de un esfuerzo o acto de Concentración, donde todo nuestra Energía Espiritual se dirigirá focalizada hacia la final consecución del Deseo.


Cuando el objetivo del Deseo se encuentra debidamente focalizado, mostraremos la debida Actitud de Visualizarlo en nuestra Mente, hasta que el asunto u objeto tome una definida tridimensionalidad cargada de coloridos matices.


Una vez que tenemos claro todos los matices y características de nuestro objeto del Deseo, es tiempo de vaciar la Mente y olvidarnos, por completo, tanto del Deseo como del mundo que nos rodea. En éste punto, ya se puso en marcha un sistema cósmico automático que, de ser legítimo, dará como resultado la materialización de nuestro Objeto de Deseo.


A partir de ése momento solo queda esperar; pero no esperar algún tipo de resultado, lo cual invalidaría todo el proceso. De lo que se trata es de ser constante, mediante un fuerte grado de paciencia, de permanecer impasible en el ninguneo de nuestro no pensamiento; es decir, en haber dejado de pensar en el original objeto del deseo. Solo dejando volar, por sí mismo, dicho pensamiento es que el objeto final perseguido podrá materializarse en cualquier instante. Esto solo podría conseguirse en un Estado de autoinexistencia o Éxtasis. Tras este imprescindible Estado de Éxtasis, el Deseo legítimo se materializará y el Acto Mágico se habrá producido.


Algunos magos inexpertos necesitan de determinados rituales con el fin de sentirse asistidos por fuerzas externas, en tanto que les falta cierta autoestima; pero si el proceso se sigue tal y como está diseñado, el Acto Mágico se llevará a cabo y se obtendrá el resultado apetecido.


De verdad, no es necesaria ninguna parafernalia externa, lenguajes mágicos ni aparellaje ritualistico alguno. Tan solo es necesario seguir la fórmula paso a paso, penetrar dentro de nosotros mismos, llamar a la puerta de la estancia donde se encuentra el Maestro Interior, el verdadero y único Mago, Christos, y dejar que sea él quien proceda al Acto Mágico y su definitiva consecución si éste fuese legítimo.


Aralba R+C